lunes, 30 de junio de 2008

El viejo truco...


Me volvi a convencer que no se puede ir al cine (ni al shopping, ni andar en omnibus, etc, etc) en las vacaciones de julio.
Fuimos a ver la version traducida del Super Agente 86, esta bueno porque las voces son casi las mismas que pasaban en la serie de TV, pero por ser traducida y "no ser de leer" estaba lleno de niños, que rompieron bastante las bolas. Ninguno de ellos habia apagado el celular, por tanto, sonaron solo 14 o 15 veces. Preguntaban que dijo?? que paso?? etc, y en los momentos de accion se paraban, gritaban, tiraban puñetazos al aire (juicio che!!!)
Hace un par de semanas fui a ver Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal, y el purrete que tenia atras era tal la emocion que le entraba que me pateaba la butaca al mejor estilo Peta Ubiña en un clasico. Despues de la tercera patada "en los riñones" le dije que aflojara y me hizo caso hasta el seguiente momento de accion, habrian pasado 5, 10 minutos a reventar.
Me estoy poniendo viejo ya lo se.
Igualmente altamente recomendable el super agente e indiana jones una porqueria, si ya viste las otras no te perdes nada (si te perdes a Harrison Ford haciendo del abuelo del de las otras peliculas)
No sere el trolito del 12 comentando cine, pero...

Dedicado a todos los padres que tienen a sus hijos en sus casas de vacaciones (no los manden al shopping ni al cine!!!)

jueves, 19 de junio de 2008

Sir Ernest Rutherford, presidente de la Sociedad Real Británica y Premio Nobel de Química en 1908, contaba la siguiente anécdota:


Hace algún tiempo, recibí la llamada de un colega. Estaba a punto de poner un cero a un estudiante por la respuesta que había dado en un problema de física, pese a que este afirmaba con rotundidad que su respuesta era absolutamente acertada. Profesores y estudiantes acordaron pedir arbitraje de alguien imparcial y fui elegido yo.

Leí la pregunta del examen y decía: Demuestre como es posible determinar la altura de un edificio con la ayuda de un barómetro.

El estudiante había respondido: lleva el barómetro a la azotea del edificio y átale una cuerda muy larga. Descuélgalo hasta la base del edificio, marca y mide. La longitud de la cuerda es igual a la longitud del edificio.

Realmente, el estudiante había planteado un serio problema con la resolución del ejercicio, porque había respondido a la pregunta correcta y completamente.

Por otro lado, si se le concedía la máxima puntuación, podría alterar el promedio de su ano de estudios, obtener una nota mas alta y así certificar su alto nivel en física; pero la respuesta no confirmaba que el estudiante tuviera ese nivel.

Sugerí que se le diera al alumno otra oportunidad. Le concedí seis minutos para que me respondiera la misma pregunta pero esta vez con la advertencia de que en la respuesta debía demostrar sus conocimientos de física.

Habían pasado cinco minutos y el estudiante no había escrito nada. Le pregunte si deseaba marcharse, pero me contesto que tenia muchas respuestas al problema. Su dificultad era elegir la mejor de todas. Me excuse por interrumpirle y le rogué que continuara.

En el minuto que le quedaba escribió la siguiente respuesta: coge el barómetro y lánzalo al suelo desde la azotea del edificio, calcula el tiempo de caída con un cronometro. Después se aplica la formula altura = 0,5 por A por T2. Y así obtenemos la altura del edificio. En este punto le pregunte a mi colega si el estudiante se podía retirar. Le dio la nota mas alta.

Tras abandonar el despacho, me reencontré con el estudiante y le pedí que me contara sus otras respuestas a la pregunta. Bueno, respondió, hay muchas maneras, por ejemplo, coges el barómetro en un día soleado y mides la altura del barómetro y la longitud de su sombra. Si medimos a continuación la longitud de la sombra del edificio y aplicamos una simple proporción, obtendremos también la altura del edificio.

Perfecto, le dije, y de otra manera? Si, contesto, este es un procedimiento muy básico: para medir un edificio, pero también sirve. En este método, coges el barómetro y te sitúas en las escaleras del edificio en la planta baja. Según subes las escaleras, vas marcando la altura del barómetro y cuentas el numero de marcas hasta la azotea. Multiplicas al final la altura del barómetro por el numero de marcas que has hecho y ya tienes la altura. Este es un método muy directo.

Por supuesto, si lo que quiere es un procedimiento mas sofisticado, puede atar el barómetro a una cuerda y moverlo como si fuera un péndulo. Si calculamos que cuando el barómetro esta a la altura de la azotea la gravedad es cero y si tenemos en cuenta la medida de la aceleración de la gravedad al descender el barómetro en trayectoria circular al pasar por la perpendicular del edificio, de la diferencia de estos valores, y aplicando una sencilla formula trigonométrica, podríamos calcular, sin duda, la altura del edificio.

En este mismo estilo de sistema, atas el barómetro a una cuerda y lo descuelgas desde la azotea a la calle. Usándolo como un péndulo puedes calcular la altura midiendo su periodo de precesión. En fin, concluyo, existen otras muchas maneras. Probablemente, la mejor sea coger el barómetro y golpear con el la puerta de la casa del conserje. Cuando abra, decirle: señor conserje, aquí tengo un bonito barómetro. Si usted me dice la altura de este edificio, se lo regalo. En este momento de la conversación, le pregunte si no conocía la respuesta convencional al problema (la diferencia de presión marcada por un barómetro en dos lugares diferentes nos proporciona la diferencia de altura entre ambos lugares) evidentemente, dijo que la conocía, pero que durante sus estudios, sus profesores habían intentado enseñarle a pensar.

El estudiante se llamaba Niels Bohr, físico danés, premio Nobel de Física en 1922, mas conocido por ser el primero en proponer el modelo de átomo con protones y neutrones y los electrones que lo rodeaban. Fue fundamentalmente un innovador de la teoría cuántica. Al margen del personaje, lo divertido y curioso de la anécdota, lo esencial de esta historia es que LE HABÍAN ENSEÑADO A PENSAR.

martes, 17 de junio de 2008

Eramos tan jovenes!!


Foto del año 92 o 93. Despedida de Diego Bardanca cuando se fue para España junto con su familia.

miércoles, 11 de junio de 2008

Microondas

Hace ya unos dias leia un articulo sobre hornos microondas, celulares y lo perjudicial para la salud que pueden ser las radiaciones emitidas por lo hornos microondas.
Un test sencillo para saber si nuestro aparato de coccion esta emitiendo ondas fuera del mismo es, poner un celular dentro y desde otro telefono llamarlo, si no suena, todo anda correctamente, pero si suena estamos en problemas. El fundamento físico del tema tiene que ver con que tanto el micro como el celular utilizan microondas y en la misma frecuencia... y como el micro tiene un escudo protector de estas cosas, deberia aislar por completo al celular, por tanto no recibir ondas y no sonar.
Hice la prueba y mi celular sono olimpicamente, por tanto segui buscando un poco mas de informacion del tema y me encontre con este video, que no deja dudas lo sanas que son las microondas para nuestra salud.

miércoles, 4 de junio de 2008

Es un tema complicado...

...como calzoncillo de pulpo.

Desde el blog http://primerolosmuchachos.blogspot.com/ los padres dicen, Primero están los alumnos y alumnas de secundaria. Así lo vemos los padres y madres que nos acercamos a esta movida. Anotá acá tus experiencias con los liceos públicos, con sentido constructivo, a los efectos de que podamos presentar casos que permitan mejorar la Enseñanza Secundaria Pública en esa etapa tan crucial y definitoria. Ayudanos a generar una voz independiente que represente los intereses de los padres y los educandos frente a las instancias de decisión en la Enseñanza Secundaria.

A partir de la no concurrencia de los profesores a dictar clase en el liceo de Nueva Palmira (hoy ya es un lugar de referencia en el tema a nivel nacional) buscan hacer saber su opinion a traves del blog. Por supuesto que la opinion de los profesores no se hizo esperar y a partir de ahi se instalo la polemica.

Creo (viendolo desde afuera) que todos tienen un poco de razon.
Los padres y alumnos tienen todo el derecho de exigir que se dicten las clases.
Los profesores que concurren tienen todo el derecho de hacer notar que ellos van y piden que no los metan a todos en la misma bolsa.
La direccion hace su trabajo para que las licencias medicas pasen a las elecciones de horas suplentes, aunque muchas veces no llegan en tiempo y forma debido a que esta eleccion es una vez por semana.

Creo que es un tema muy complicado y que tendrian que entre todas las partes juntarse para poder buscar una solucion al tema.

lunes, 2 de junio de 2008

El Miranda, el Zorrilla, el Dámaso...

... y el Medulio.
Desde el año 1996 aproximadamente el liceo de Nueva Palmira se llama oficialmente, Dr. Medulio Perez Fontana.

Increiblemente los alumnos y profesores (sobre todo que no son oriundos) llaman al liceo como "el Medulio".

No deja de sonarme raro, para mi es el liceo, cuando yo iba no tenia nombre, si alguien te preguntaba donde estudiabas (o concurrias a clase, ya que no es lo mismo) decias en el liceo de Palmira y se acababa no habia mas para explicar. Como no habia (ni hay) otro no le podias errar.

El tiempo pasa, nos vamos poniendo viejos...


Ventana o pasillo?


En el dia de ayer me volvia desde Nueva Palmira en omnibus.

Sobre el mediodia fui hasta la agencia a marcar el pasaje que ya lo tenia sacado abierto.

Para el turno en que me queria venir solo quedaban dos asientos ventanilla, el 1 y el 4, los asientos mas incomodos e insufribles del omnibus juntos con el 2 y el 3. Viajas apretado contra la mampara de separacion con la cabina de los choferes, escuchas todas las conversaciones del guarda y chofer y muy dificilmente puedas dormir debido a la puerta que se abre y cierra a cada rato mas los amables toques en la cabeza y piernas de quienes suben y bajan, un lugar de privilegio.

Por tanto pedi pasillo y a otra cosa.

Al subir al vehiculo de transporte colectivo me encuentro que en realidad por la numeracion interna me tocaba ventanilla, de mas esta decir que de ahi no me sacaban ni con la montada. Dos paradas mas adelante sube quien seria mi acompañante de viaje que se llevo un sorpresa aun mayor que la mia al ver que le tocaba pasillo, que calentura que tenia ese gordo por dió!!!!! El pobre guarda se llevo una puteada de campeonato sin tener la mas minima culpa, pero el pasajero con alguien se queria descargar.

Sera muy complicado que todos lo asientos de los omnibus tengan la misma numeracion en los asientos?? Si me pasa lo de mi compañero de viaje yo estaria igual que él.